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martes, 29 de mayo de 2007

Semana Vallenata en Grupo Copera


Garcia Marquez dijo alguna vez que Cien años de soledad era un vallenato de 400 páginas...

Y es que el vallenato es eso: una mezcla de realismo mágico con mucho de vida real que se vuelve canción y le canta a la vida, a sus alegrías y a sus pesares. La unión de las alegres notas de una caja, una guacharaca y un acordeón retumban en los oidos de todo aquel que las escucha por primera vez y entran para quedarse por siempre.

Quien dijo gueeepaaaa


Este fin de semana mientras la tarima Francisco el hombre de la plaza Alfonso López de Valledupar estará a reventar de fanáticos de la música de acordeones coreando las canciones de moda, cada uno de los integrantes del Grupo Copera estará en lo suyo: En Suecia David de latin party, en Cordoba Cheo atendiendo a algún enfermo de última hora y en Barcelona Mauricio estudiando más y más, Alejandro editando algún video y Carlos pegando botones ...

En fin cada uno estará en su pequeño mundo, pequeño mundo que en la distancia no deja de recordar las notas de un acordeón que -en unos más, en otros menos- ha dejado recuerdos, nostalgias y remembranzas.

Pero nada de nostalgia, El Vallenato es alegría, vida y corazón por eso El Grupo Copera le rinde su homenaje...

DISFRUTENLO...

De Vives a Durán: Mi Experiencia Personal con el Vallenato

“…no es malo que evolucione la juventud, ellos tienen derecho a evolucionar…”
Alejo Durán

Por David Pino

“Como da vueltas la vida”, me dijo mi mama hace poco cuando hablábamos por teléfono y escucho una canción de los Zuleta en el fondo. Y es que eso es de sorprender para los que me conocen bien; de niño escasamente escuche algo diferente a una salsa en mi casa. Mi papá, mi tío Toño, y otros tíos son declaradamente salseros –casi me atrevería a asegurar que ellos en su vida no han puesto un vallenato en un equipo de sonido- y yo crecí en ese ambiente. Cuando ellos tomaban tragos y escuchaban música en mi casa yo casi siempre estaba al pie, escuchando, poniendo discos, a veces más porque eso me daba derecho a una Pony Malta que por la misma música, pero de igual modo, la llevaba en la sangre, se iba cultivando dentro de mí. Anecdóticamente, empecé a bailar porque mi papa solía darme una propina por hacerlo; y aún no se porque mi papá hacia eso, si mi hermana que es la que sabe bailar solo tenia que llorar para recibir la misma propina que yo tenía que sudar al ritmo de una salsa brava. Así crecí yo, como un salsero.

Por eso, hoy en día declaro que mi experiencia con el vallenato ha sido tardía y apenas estoy conociendo de este genero. Como cualquier extranjero desprevenido del género mi experiencia directa inicio con los vallenatos de Carlos Vives y sus interpretaciones de Escalona. A partir de Vives fui iniciando un camino lento y en retroceso que pasa por Diomedes Díaz (poeta cantor), Hermanos Zuleta, Villazón, y por supuesto los Juglares Legendarios como el gran Alejo Durán, quien es el más grande interprete que he escuchado; su forma tan simple, pausada y melancólica de tocar y cantar llevan una fuerza impresionante que me ha transmitido la verdadera esencia del Vallenato.

Últimamente, el hecho de estar afuera de mi país innegablemente ha aumentado mi pasión por este género, porque sus letras y melodías son innatas a mi origen y a mi tierra, y porque me ata a mis raíces. Y a medida que me adentro en él nunca termino de responderme a mi mismo la duda que un día se planteo el mismo García Márquez: “no sé qué tiene el acordeón de comunicativo que cuando lo oímos se nos arruga el sentimiento”.

Para terminar, admito que después de todo mi experiencia con el vallenato no ha sido ni tan nueva ni tan de gratis, primero porque es obvio que en nuestra tierra es imposible ser ajeno al genero, y siempre me ha despertado admiración; segundo porque pase parte de mi vida en la Guajira, tierra de acordeones y Juglares; y tercero porque también lo llevo en la sangre, por mi mamá y por mi abuelo quien es un declarado seguidor de Alejo Durán.


Vallenato, sentir y poesia hecha canción


Por Alejandro Angel Torres

El cliché dice que a todos los costeños nos gusta el vallenato y que desayunamos, almorzamos y comemos con el vallenato de fondo, al menos eso nos dan a entender todos aquellos que viven de Sevilla, Magdalena en adelante; es decir los cachacos.

Recuerdo que tenía 13 años cuando empecé a escuchar vallenato; a decir verdad en mi casa nunca han sido mucho de escuchar música, al menos no es una costumbre tan arraigada ni hay predilección por un género en especial y el único en mi familia que tiene tanta pasión por el vallenato como yo es mi tio Alvaro pero el se fue a vivir a Bogotá cuando yo era un "pelaito" de 5 años así que no creo que la influencia venga de por ahí. El hecho es que las notas del acordeon, la caja y la guacharaca y los sones, paseos y puyas se volvieron parte de mi banda sonora desde entonces.

Pero el cliché no es tan cierto, en mi Santa Marta natal mientras yo empezaba a disfrutar de las alegres notas del acordeón y de las narraciones de vivencias, alegrias y pesares que aquellos juglares hacian con sentimiento único muchos de mis amigos se hacian fanaticos de grupos de rock, rock en español y pop que a mi en esa época no me sabian a nada. Era un poco luchar contracorriente por que pese a ser varios los de mi grupo los que podiamos estar toda una noche escuchando los cantos de Diomedes Diaz, Rafael Escalona, Los Hermanos Zuleta, Iván Villazón y demás cantantes que han hecho grande este género había otra parte del grupo que queria escuchar las baladitas cursis, al infaltable Maná o el último disco de Soda Stereo -ritmos que
afortunadamente y con el tiempo también aprendí a apreciar- .

Aún asi sobreviví, gracias a mi gusto por la música en general y sabiendo que a través de ella se expresan sentimientos y sensaciones pude cultivar mi amor por la música vallenata combinándola con muchos y diversos géneros. Hoy en día es menos díficil, el vallenato es un
género consolidado, que ha sabido evolucionar y ha permitido que se mantenga su esencia pero sin permanecer ajeno a la llegada de nuevos ritmos y nuevos públicos.

En mis tiempos los cantantes eran lo que estaban y punto, desde los clásicos Alejo Duran, Escalona y Emiliano Zuleta pasando por Villazón - uno de mis favoritos en esos primeros años-, Los Betos, Jorge Oñate y Rafael Orozco todos ellos cantantes consolidados que habian dejado ya
más de una canción para la historia. Pero la música como la vida evoluciona y hoy nos encontramos ante una "nueva ola" de interpretes que están tomando su lugar en la esfera vallenata y se miran de tu a tu con los interpretes legendarios; nombres como Silvestre Dangond, Peter Manjarrez, Pipe Pelaez, Luifer Cuello y otros se dan el lujo de tener una fanaticada más fiel que la que pudieron tener los cantantes legendarios, algunos han alcanzado una fusion casi perfecta al combinar el vallenato con el merengue -otro de mis ritmos favoritos- en canciones como Borracha con Pipe Pelaez y Fernando Echavarria de la Familia André y Vivo por Ella de Peter Manjarrez con Sergio Vargas que han calado hondo entre sus oyentes e incluso han logrado que en el interior del país el Vallenato se escuche cada vez más y más. Quien lo diría los cachacos oyendo vallenato...

Yo en la distancia solo puedo recordar, me ayudan mis muchos cds de parrandas pasadas y me ayuda el internet con las emisoras que cada vez que puedo escucho y que me permiten estar un poco a la moda en los últimos interpretes. Ahora sólo falta poder repetir una de aquellas múltiples amanecidas en la orilla de la playa escuchando una y otra vez... "ay la parranda es pa' amanecer y el que se duerma lo trasquilamos..."

Mi imagen del vallenato


Por Carlos Mario Soto

En 1983, año en que nací, ya el vallenato tenía un lugar establecido en el ámbito cultural colombiano. Ya se había peleado con todos los conocedores de la "buena música" y ya se había hecho respetable dentro del folclore nacional tanto como la cumbia o el joropo. Aún así, en mis más antiguos recuerdos, la imagen del vallenato seguía siendo deslucida por el ámbito licorero en el que se movía. Nada podía hacer que el fuelle respetable compartiera su prestigio con quienes lo escuchaban. El vallenato por tanto seguía siendo música de corronchos.

Ya sea porque fui un corroncho al crecer, o porque más bien no lo fui, me fui educando con sendos parlantes en las cantinas cercanas a mi casa, por una esquina salsa brava y por la otra vallenato ventiao. A mi casa llegaban los acordes del Cocha Molina, la interpretación del Pollo Isra o las composiciones de Emilianito; no muchos bajos, no muchas historias, pero los juglares se sentían ahí.

Ya cuando de verbena se pasa a la rumba con el Joe y con Sergio Vargas, me intereso más por los vallenatos alegres de Los Betos, Diomedes y Juancho Rois. El vallenato había sobrevivido al cambio en el modo de festejar. El vallenato alegre y bailable ya no era sólo para los viejos alcohólicos y corronchos de las esquinas. Ya había pasado (como yo lo veo de la mano del Binomio de Oro) por las clases más reacias a aceptarlo. El vallenato era para corronchos simple y llanamente por fama.

De pronto algo cambió. Un nuevo ventarrón sacudió la música y sólo se salvó la salsa a duras penas. La salsa se quedó como en una fotografía, una película en cámara lenta, o una película en red que carga lento. Del merengue solo sobrevivió el hombre merengue, los Vargas* y la Bachata rosa... ¿Y el vallenato? Aun no puedo hacerme una idea de qué sucedió pero las muertes de Rafael Orozco y la de Juancho Rois coinciden con esa época del ventarrón. Para mí el flujo del valle mutó. Mutación que nos (me incluyo) volvió a la imagen de que el vallenato es corroncho por las personas que lo escuchan. Esta vez yo no sentía folclore en el acordeón y mucho menos en las voces del momento. Habían nacido los "ponme cachos pero no me dejes"; el vallenato llorón.

Ahora, años después, la marea baja y la nueva ola se deja ver con artistas frescos y a la vez influidos por lo que se escuchaba otrora. El vallenato me vuelve a sonar a folclore aunque no se parezca a lo que recordaba de niño.

A mí me gusta el vallenato B.CD y A.DVD (antes del disco compacto y posterior al disco digital versátil).

* No los Vergas, ni los Sergios.

Ritmo de poca monta, aja como tu digas..


Por Juan Manuel Carrillo

El caribe, lugar de brisas que te arrullan hasta llevarte al mas placentero sueño, lugar de grandes palmeras que se levantan como grandes atalayas, de grandes playas de arena blanca, lugar de realismo mágico, pero en especial de ritmos endiablados que se meten en el cuerpo, que sin saber porque en el momento en que tu menos esperas te hacen mover el pie a ritmo de la percusión de sus canciones, es que en el caribe gracias a un regalo de la divina providencia, hay tal cantidad de ritmos que lo hacen la envidaría cualquier de las regiones del mundo, ritmos pegajosos que te invaden el alma hasta apoderarse de tu cuerpo y hacerte saltar a bailar.

Uno de estos ritmos es el vallenato, ritmo oriundo del caribe colombiano mas concretamente del valle del Cacique Upar en el que se muestra en toda su expresión la fusión de razas y culturas que han pasado por ese lugar del mundo, donde todavía se puede vivir a base de una ilusión, este mes ese ritmo musical celebra su ya tradicional festival de acordeones, el de este año tiene en especial el de ser el de rey de reyes, y aunque nunca he tenido el privilegio de asistir a uno y no puedo hablar del ambiente que reina en dicho festival si puedo hablar del vallenato como lo siento.

Nací en una casa donde lo que mandaba la parada como buena casa barranquillera era la salsa, el vallenato según mi progenitor era música de poca monta que no merecía ser escuchada, y así crecí, sin conocer los vallenatos de turno ni los clásicos, porque mi niñez transcurrió, entre los boleros de mi agüela, la difunta Marta Cepeda Viuda de Palacio como firmaba ella en todos sus documentos; entre las rancheras de Mi Tía Myriam; entre la indiscutible salsa brava del Dr. Chalo Carrillo; que lo poseía todo como una multinacional gringa y el merengue que veías bailar a las parejas jóvenes en toda fiesta por ser mas fácil de seguir.

Pero mas pudo la constancia de un ritmo que cuado escuchas se te mete dentro y no puedes sacar de tu cabeza y sin saber como, empiezas de una forma inconciente a tararear los estribillos de sus canciones

Fue así como a los diez años me encontré cantando esto: “Ay es que me duele, es que me duele válgame Dios, 039, 039, se la llevo”, y fue cuando de mi comenzó a desaparecer esa idea preconcebida de que el vallenato era una música menor, comencé a escuchar las letras de cada vallenato que escuchaba cuando estaba con los mayores en alguna reunión, por que en casa era un sacrilegio atentar contra la hegemonía salsera, se tenia la idea que si en el equipo de sonido de la casa se escuchaba un vallenato automáticamente se dañaban los parlantes del equipo, o había que salir comprando una aguja nueva para el tocadiscos de vinilo. Pero mas fuerte fue la curiosidad y lo que las letras decían y me fueron interesando mas y mas , porque sentía que las letras no eran canciones si no poesías; poesías que se le canta a lo cotidiano, a los amores correspondidos, a los no correspondidos, a la suegra, a tu tierra, a los amigos, y entendí que para cada ocasión existe un vallenato; y fue así como puede arrancarme esa idea preconcebida, y empezar a disfrutar del vallenato, y descubrí que era una potente arma para entrompar, porque que mujer se resiste al decirle al oído o a viva voz en medio de una parranda “oye bonita cuando me estas mirando yo siento que mi vida cubre tu cuerpo” o encontrártela por la calle y decirle “hace tiempo que yo quiero vida mía hablar contigo, deja mi palabra larga penetre en tus oídos”, por mas indiferente que sea o por mas enfada que este la muchacha no tiene de otra que ponerse a hablar contigo, y aunque parezca poco original, utilizar la letra de un vallenato para tal propósito; digo como decía un poeta y de los grandes, La poesía no es de quien la escribe si no del que la necesita y la usa. Yme pregunto yo que buen costeño no ha necesitado en cualquier momento de su vida de una buen verso vallenato?

Porque igual sirve para todo, como para lo anteriormente mencionado como para llorar por el corazo roto, o para recordar la tierra que te Quiere te Añora y espera que un día vuelvas a ella.


Carlos Vives y algo más

Por Mauricio Carrillo

Desde el punto de vista de incidencia en el mercado nacional e internacional, la irrupción de Carlos Vives en el escenario vallenato fue algo parecido a la llegada del ansiado mesias. El ritmo de los juglares del valle de Upar se empezó a escuchar en reconditos lugares de todo el mundo, a cada hora, se leían noticias de ventas del cantante samario permitiendo que muchos otros vallenateros lograran alcanzar la cima en forma de presencia musical en emisoras de los cinco continentes.

Una vez escuché decir que después de Carlos Vives cada segundo una canción vallenata se empeza a escuchar en el mundo, colombianos recibían alborozados los ritmos que entraban sin permiso en sus oidos en discotecas frugales llamadas ÑapBuff, City Tropic, Standard o Baja Beach. Un amigo me contó una vez que realizando un recorrido por ciudades europeas al emtrar en el Moulin Rouge había escuchado un tema compuesto por Rafael Escalona y cantado por Carlos Vives. Esa misma persona me contó también que en un garito de Amsterdam, al que entró a comprar..... un litro de leche, encontró un grupo de personas que flipaban en medio de una humareda producida por... el litro de leche consumido, su asombro llego con la melodia que escuchaban sus oidos, era nadad más y nada menos que “Alicia Dorada” de Alejo Durán. No sé lo creía, buscó explicaciones, pero no las encontró. Me lo cuenta cada vez que estamos bebiendo vasos de leche y preparando barbacoas, Cuento esta anecdota porque me permite dar inicio a mi aportación al multipost de la leyenda vallenata.

Muchas personas en el mundo consideran que el vallenato nació con Carlos Vives dado que es lo primero que escucharon y que bailaron por tierras norteñas. Pero no es así, cada vez que puedo me reuno con mis amigos en grandes parrandas vallentas, tipo Plaza Espanya e invitamos amigos y amiguitas para bailar y enseñarles la historia del vallenato, que con todos sus juglares y poetas de la canción nos permiten escamotearles escotes a la vida.

De este modo en pleno hemisferio norte podemos compartir con amigos las enseñanzas de la gloria de Alejo Durán, la trajedia del “039” contada por el mismo Durán, las razones del poeta para “no volver a Patillal” o el interés de cada miembro del Grupo Copera de abrir una tienda llamada “Los recuerdos de ella” y como recordamos Barranquilla, Santa Marta y Colombia en general con cada avión que casí nos deja.

Es una verdad como un puño que el vallenato sólo pudo nacer en una región como el Cesár y la baja Guajira, tierra donde el floklore es más importante que la vida misma, de ahí que pueda llegar a cualquier rincón del mundo, porque transmite la historia de una esquina remota del mundo que guarda el frasco de las escencias de los hombres y mujeres buenos.


Mi Top 10 Vallenato

Por Alejandro Angel Torres

Escoger las mejores canciones del vallenato es una tarea dificil si no imposible, hay tantas canciones, tantos ritmos y tantos interpretes que cualquier intento por escoger las más importantes tendrá detractores por un lado o por el otro....

Por tanto pondré aqui las mejores para mi, una lista que seguro no me dejara contento ni a mi mismo, puesto que quisiera destacar muchas más...en fin estos son los 10 vallenatos que más recuerdos me traen sin orden de preferencia:

1. La Gota Fria de Emiliano Zuleta
"moralito, moralito se creía que el a mi, que el a mi me iba a ganar y cuando me oyo tocar le cayó la gota fria..."

2. Bonita de Diomedez Diaz.
"oye bonita cuando me estás mirando yo siento que mi vida cubre todo tu cuerpo..."

3. 039 de Alejo Durán.
"mi negra se fue llorando a mi esa cosa me duele, se la llevo un maldito carro aquel 039"

4. Palabras al Viento de Jorge Oñate.
"se que lo que canto aqui que lo que canto aqui puede ser mi tormento"

5. La Celosa de Rafael Escalona.
"cuando salga de mi casa y me demore por la calle no te preocupes anita..."

6. La Hamaca Grande de Adolfo Pacheco
"y llevo una hamaca grande, más grande que el cerro e' maco"

7. Por un Amor de Iván Villazón.
"ultima canción que te compongo, no volveré a hablar más de ti en mis cantos..."

8. El Más Fuerte de Jorge Oñate
"de que sirve la fuerza que tu amor me relata de que sirve tener lo mas fuerte del mundo y vivir sin tu amor..."

9. Por Jugar al Amor de Los Betos.
"pero de tanto jugar al amor sin un amor me he quedado en la vida"

10. Mi Hermano y Yo de Los Hermanos Zuleta.
"porque cuando escucho a mi hermano cantar quisiera una copa llenar de licor..."

Se las dejo ahi...

Una nota del nota...

El Show de Jimmy fue un musical cómico que se emitió durante los años ochenta y principios de los noventa en la televisión colombiana. Era sinónimo de risa el hecho de ver a Jimmy junto al culebro Casanova, hoy difuntos.

EL vallenato era un recurrente episodio en sus programas y una buena y cálida tarde de Barranquilla en la sala del cuarto piso del Princesa Nogal vimos como se juntaban perfectamente la música y la comedia, fue uno de los momentos cumbres de su programa mientras a Jimmy se le veía disfrutar de sus dos pasiones: el vallenato y la comedia.

He aquí un pequeño aporte:




Esto es Folclor! (Peter vs Silvestre en Cienaga)

Por David Pino

Aquí un emotivo momento de parranda y piqueria vallenata con Peter Manjarrez y Silvestre Dangond en una presentación en el pueblo de Cienaga. Una presentación que ya es mítica dentro del Grupo Copera.

Tres canciones
Por Carlos Mario Soto

Esta vez me toca hablar de vallenato. ¿Qué decir? Qué mejor que una parranda pa’ inspirarme.

“¡Ahora sí. Ay que rico…!”, timbal, guitarra, un grito. Luego suena la acordeón, fuerte, melismática, violenta y al tiempo elegante. Acordeón, caja, garganta y guacharaca cuentan su propia historia. Una historia de amor; “en la ventana marroncita adonde duerme mi adorada”. Un amor de serenata; “toque tres canciones bien bonitas”. Una historia de amor rebelde; “que no me importa si se ofende”. Una historia de amor sincero; “que yo la canto con el alma”. Un amor caribeño; “para esa linda morenita”. Un amor dolido; “este sentimiento cariñoso gira alrededor de mi alma buena”. Un amor no correspondido; “eso es lo que a ti te importa poco”.

¡Ujúpa, que buena parranda carajo! Y “Déme licor que la vida es corta…”

Súbale el volumen a los parlantes, agarre una cerveza, y déle play al video.

sábado, 7 de abril de 2007

Feliz cumpleaños Barranquilla...

Barranquilla, una ciudad de múltiples recuerdos y múltiples nombres, -Curramba, La Puerta de Oro, La Arenosa- hoy cumple 194 años de fundación y por eso hoy el Grupo Copera le quiere rendir un pequeño homenaje a su Ciudad natal, Ciudad de sus amores.

Barranquilla es una ciudad amada e inolvidable para nativos y foráneos. Una Ciudad que enamora y contagia alegría y entusiasmo. Una ciudad que históricamente ha sido ejemplo de progreso y pujanza, pero una ciudad que hoy nos necesita y lo merece por todo lo que nos ha dado. Por eso que mejor regalo que seguir trabajando por ella y darle mano para que vuelva a ser nuestra Curramba de Antaño.

Feliz Cumpleaños no 194 Barranquilla,


Barranquilla: El Mejor Vividero del Mundo


Por Alejandro Angel

Barranquilla huele a ilan ilan dice Kelly, por otro lado llega humberto y canta "si el toro fuera de azucar y los cachitos de panela si yo fuera garrochero cuanta garrocha le diera"; Iliana comenta que barranquilla es un caos, pero no un caos cualquiera, un caos organizados, aclara; Noris por su parte extraña el olor del pescado frito en Puerto Colombia...

Cuatro personajes, cuatro vidas paralelas, cuatro visiones de Barranquilla que lo único que tienen en común es el sabor agridulce de la distancia, distancia de la tierra que los vio crecer y que para ellos, aún a 12 mil km de su curramba amada , siempre será el mejor vividero del mundo.

Mi homenaje a Barranquilla es a 25 cuadros por segundo. dale click al recuadro de arriba y disfrutalo.



Barranquilla Tiene Dos Amores


Por David Pino

I

La ciudad parecía muerta y se suspendía en un instantáneo letargo que amenazaba en hacerse eterno. La propia tristeza que me embargaba a mi mismo en aquellos momentos no me permitía darme cuenta que en esos instantes la ciudad dejaba de ser la misma, de hecho parecía otra, otra completamente distinta, incluso una fría y gris en un aburridor domingo de invierno de una remota urbe septentrional. Era una ciudad que poco tenia que ver con la de unos minutos atrás, con la que había estallado de delirio cuatro días atrás. En esos momentos no había casi nadie en las calles, y los pocos que lo estaban lucían una cabizbaja pose sentados en un bordillo o recostados a un poste. La razón no era otra sino que nuestro equipo del Alma estaba perdiendo un titulo que parecía más que asegurado. Pero de pronto ocurrió el milagro, como un mismo emisario de la Divina Providencia apareció la pierna rematadora del argentino Riboneto y anoto el gol que metía a Junior en la pelea por el titulo. Entonces, ocurrió el milagro que instantáneamente le devolvía la vida la Barranquilla, ahora resucitaba, los Barranquilleros recuperamos nuestra sonrisa y alegría natural, pero con mucho más entusiasmo y emoción, Barranquilla renacía como el ave Fénix. El desenlace de la historia es bien conocido, el ariete costeño Martín Arzuaga sello el Campeonato desde los onces pasos y la locura colectiva se desató, la Barranquilla más feliz estaba de vuelta porque el Junior era Campeón y empezaban los Carnavales.

II

Porque si hay dos cosas en el mundo que un Barranquillero ama sin reparos de su tierra son el Junior y el Carnaval, y si vienen juntas mejor; y tiene claro que sus dos templos por excelencia son la Vía 40 y el Metropolitano. Al Carnaval siempre se le ama sin reparos, cada año se vive diez meses esperando que llegue. Y Barranquilla con el Junior son como dos viejos que viven en eterno noviazgo, que se quieren y se pelean, pero siempre regresan, que se ven y se encuentran en el Metropolitano, no es más que una pequeña representación de toda la ciudad. Cuando el estadio se llena se dan cita todas los tipos de Barranquilleros habidos y por haber: el trabajador de clase popular que nunca falla, el viejito que no se pierde una desde el Romelio, la señora que le guarda más fidelidad al Junior que a su marido, la nueva generación de hinchas del frente, la gente farta que va solo cuando el equipo gana, el man del rebusque, etc. Y todos ellos se verán nuevamente en la Vía 40, con unas cervezas y unos aguardientes encima, con una mascara de marimonda puesta, con un batucon de monocuco encima, con un sombrero vueltiao encima, bañados en maizena o simplemente borrachos.

III

Es por eso que no puede existir un lugar en el planeta más alegre que Barranquilla cuando el Junior es Campeón y se adelanta el inicio los Carnavales. Solo es cuestión de que oiga el pitido que sentencie el titulo para que la locura colectiva estalle. La gente se vuelca a las calles, se baña en maizena, y se arma una Batalla de Flores decembrina por el rió humano que invade las calles, y donde cada currambero se libera y se entrega por completo a la celebración porque la autentica expresión del ser Barranquillero no tiene mejor sitio para ser expresada que la fiesta deportiva-carnestoléndica. Se vivirán unos dos días celebración en una fiesta que solo terminará hasta el miércoles de ceniza. Y serán unos Carnavales inolvidables porque tendrán un sabor especial, el sabor de la victoria, y no habrá ni evento ni artista que no mencione ni felicite a los Tiburones, ni Barranquillero que no quiera hacer parte de la Fiesta.

Gracias Junior, Gracias Barranquilla, por tanta alegrías.

El 13 de Septiembre

De Barranquilla a Barcelona Parte I

Por Carlos Soto

“Mira ve; esas son las cuchilladas del río sobre el mar”

Señalaba las aguas revueltas de la desembocadura del Magdalena sobre el mar Caribe mientras le decía estas palabras a Brooke. Estaba con ella y con mi papa en “la punta” pescando, tomando el sol, turisteando, remembrando, tomando fotos… esas fueron de mis ultimas horas en la ciudad que cumple sus primaveras en primavera.

Temprano salimos de mi casa en San José luego de llegar mi gran amiga. Un LADA de esos “resistentes” nos llevó camino a Las Flores. Lluvia y amanecer se juntaron ese dia para recibir a tres caminantes del tajamar más; tres optimistas pescadores, uno de mojarras y dos de sueños. A nuestra llegada mi imagen no correspondía a lo que yo recordaba de hace ya varios años; “la punta” había cambiado.

Desde aquella extremidad de Baranquilla se podía ver una muestra de la identidad de la ciudad. Ambiente húmedo de mar y de río; monte donde solo debería haber arena; playa de arena negra perla y aguas refrescantes; mosquitos hambrientos y escamas recién desprendidas sobre el suelo; ferrovia de crecimiento, herrumbre de descuido y piedra que para perdurar; nylon pescando submarino y acero flotando; en fin. Desde aquella extremidad pensé en lo que dejaba, en lo que me había construido. No llevo dos años fuera de Barranquilla pero quisiera tener su edad viviendo – y habiendo vivido - siempre en ella.


Mi Decálogo Sobre Barranquilla

Por Mauricio Carrillo

Barranquilla cuenta con un pasado esplendoroso, pero su presente no es tan halagüeño como desearíamos los amantes de esta urbe caribe. Hoy en día Barranquilla es reconocida mundialmente por sus aspectos culturales, pero también es cierto que políticamente deja mucho que desear. Por esta razón escribo, sin detenerme a explicar detalladamente, mis diez vias de desarrollo que debe ocupar a Barranquilla en los próximos años. Algunos podrán estar deacuerdo, otros esperarán más información al respecto. Para los segundos, ya vendrán momentos en los que sea necesario mayor exposición. Por el momento y a grandes trazos he aquí mi decálogo sobre Barranquilla:

1. Organo impulsor de empresarios e innovadores: La ciudad debe brindar la posibilidad de la creación de empleos por medio de PYMES y nuevas ideas de negocio. Para esto se hace necesario que el gobierno local se asocie con todas las Instituciones educativas superiores de la ciudad para crear un Instituto que brinde formación, herramientas y análiticas sobreen negocios. Este sería un organo totalmente gratuito para los usuarios, que tendrían seguimiento y asesoría desde la concepción de la idea hasta la puesta en marcha de la empresa. Está iniciativa se hace impresindible para el desarrollo empresarial de la ciudad y por esto el hecho de que sea gratuito es totalmente valido, ya que la inversión dada se revertira en forma de miles de empresarios trabajando, creando puestos de trabajo y generando impuestos para la administración.

2. Programa marco de creación de PYMES: Se hace necesario que Barranquilla promocione firmemente la creación de nuevas iniciativas de negocio. Por esto y junto al organo impulsor, se hace necesario la legislación de una política empresarial más amigable con la reducción drastica de precios para la creación de empresas. Una política de subvenciones y ayudas para la innovación y la creación de viveros de empresas que provean espacios de trabajo a muy bajo coste.

3. Promoción del I+D: La creación de conocimiento en una sociedad es un pilar fundamental para su desarrollo. Por esto se hace necesario una política de becas, ayudas y subvenciones que permitan la Investigación + Desarrollo con el fin de lograr visualizar una via de civilización a la barranquillera. La ciudad no debe esperar que la tecnología este inventada para después tratar de adaptarla a sus necesidades. El camino es desarrollar investigaciones propias con el fin de obtener resultados relacionados al 100% con las carencias y manifestaciones curramberas.

4. Promoción cultura ciudadana: El gobierno local debe evaluar las necesidad del barranquillero y su forma de actuar y promocionar estos identificadores culturales. De esta forma crear un sentimiento de arraigo poderoso que permita a las personas que habitan la urbe colaborar, cuidar y desarrollar su ciudad.

5. Posicionamiento de Barranquilla como eje cultural latinoamericano: La Arenosa fue hasta hace unos años punto de encuentro dentro del ámbito latinoamericano. Esto se debe recrear y potenciar. Este posicionamiento sería uno de los puntales de la ciudad en su desarrollo, el hecho de posicionar el nombre de Barranquilla como eje cultural permitirá atraer el turismo, las empresas y los eventos internacionales. Debemos hacer de Barranquilla una ciudad seductora, pero no por cualquier motivo superfluo, sino como eje cultural y ciudad de posibilidades sociales para el escenario internacional.

6. Think than: Barranquilla debe ser generadora de ideas, para esto se debe crear una institución que se dedique a desarrollar ideas sociales, culturales y políticas que le favorezcan. Ahora mismo la organización que parte con mayor ventaja al respecto es la Universidad del Norte, por esto creo que dicha institución debe hacer el papel de Think Than para favorecer los intereces barranquilleros. Así se explotará la imagen de la ciudad y potenciarán las informaciones relacionadas con las diez iniciativas de este texto.

7. Promoción de la ciudad como eje estrategico del caribe: Barranquilla debe posicionarse como la ciudad más importante de la cuenca del mar Caribe. Estrechar lazos y firmar convenios de ayuda y desarrollo con diferentes ciudades de la región. Se debe exportar la idea de vida barranquillera, el gobierno local debe buscar la precencia de la industria barranquillera en el extranjero. La ciudad debe tratar de potenciar una hegemonía para que barranquilla se haga impresindible para cualquier evento dentro de la región.

8. Programa márco de urbanismo a más de 50 años: la ciudad debe pensar como quiere ser en un futuro, que sitios y arquitectura desea tener, pero no a una vista de cinco años, como se hace hoy. Sino pensando un programa a no menos de 50 años. Así desarrollar los elementos arquitectonicos, el plan de ordenamiento territorial y que no permita cambios. Todo se debe adecuar a este plan y por ende la malla urbanistica debe estar plenamente identificada a las necesidades del barranquillero. Esto permitirá un desarrollo más concensuado para una política de inversiones a muchos años vista, no motivadas por las electorales. La iniciativa propiciará, además, una visión de tranquilidad para los inversores y emprendedores de dentro y fuera de la ciudad.

9. Transporte masivo: Aunque soy un convencido de que el cemento no es sinonimo de desarrollo y modernidad, la ciudad necesita una infraestructura de transporte masivo independiente del entramado actual de comunicaciones. El actual programa de Transmetro me génera recelos por la ambigüedad que puede generar unas vias que también pueden ser usadas por los mecanismos actuales de movilidad. Por esto creo que se hace necesario implementar un medio que tenga vias independientes y que a la vez no resulte muy caro. Para mi que he conocido casi la totalidad de tipos de medios de transporte masivo, considero que en Barranquilla se presentaría muy bien el sistema de tranvías moderno. Es un sistema ligero, barato dentro de lo que cabe y que posee una red de vias totalmente independiente del de los coches. Dentro de la mentalidad del barranquillero esto sería ideal, dado que no habría interferencias entre las diferentes vias y sus usuarios.

10. Reordenamiento vehícular: El sistema de buses metropolitano debe pasar a ser manejado por la administración pública en su totalidad. Así se acabaría con la competencia y la necesidad de busqueda de clientes. Sí se crea una autoridad del transporte y una empresa pública con empleados públicos pasaremos a tener una red de transportes más estructurada, controlada y sosegada, con todo lo que ello implica.

Aqui están las diez empresas que considero que deben ser el camino para el desarrollo de Barranquilla. Ahora, no estoy seguro si el cuerpo político está maduro para acometer este desafío, lo único que puedo asegurar es que el intercambio que constantemente se está realizando a los dos lados del atlántico tiene los visos de la revolución silenciosa, esa que no se hace con fusiles ni con diatribas, sino con constancia, trabajo y diligencia. Aguzate! Le dicen a Barranquilla, yo digo que se agucen ellos primero!

Ombe Barranquilla

Por Cheo Carrillo

Cuando el 23 de diciembre el indio se disponía a pedir una cerveza en la barra de la planta alta del jamboree la discoteca de moda para guiris, y extranjeros de Barcelona; quedo extrañado al oír unos acordes conocidos, su cabeza no daba crédito a lo que escuchaba, …
Bacilalo rumbero … del caribe aflora bella encantadora con mar y rió una gran sociedad..
Si .. si es en Barranquilla me quedo .. pensó atónito no puede ser; la alegría lo embargo de tal modo que grito desde lo alto. Mauricio , Mauricio oye .. el interesado no caía en cuenta creia que lo estaba saludando y entonces fue ahí cuando no pudo mas, se arboleo desde los 180 cm de altura del bordillo de la barra sin importar que se malograra la tapita en la caída, se fue corriendo a abrazar a su gente, escuchen es en Barranquilla me quedo, al comprender todos la situación el grito que se lanzo se escucho en todo el salón y la alegría y euforia que despertó tal situación en ellos fue tal que la gente preguntaba a su alrededor que es lo que pasa.. por que tanto alboroto.

La verdad es que no se que tiene la música que con un solo acorde nos transporta a sitios que están a muchos kilómetros de distancia; nos hace recordar, sabores, colores, sensaciones, olores y viejos amores, si, porque eso fue lo que esa canción despertó en los integrantes del ya disuelto junior de la vila, un viejo amor llamado Barranquilla. O por lo menos fue lo que despertó en el indio. La sensación de estar por un instante en alguno de los bailaderos de Barranquilla.

Recordó aquellas tardes de vacaciones sentados en la terraza de la sra cora echando cuentos, junto con las peripecias de los mejia para escapársele al viejo pacho y no ir así esa tarde a trabaja en mejia baterías el almacén familiar, y así quedarse jugando bola de trapo toda la tarde si porque esa era la gran pasión de la cuadra de la calle 83 del barrio los nogales. La pasión era tal que contaba hasta con divisiones inferiores, y los triunfos eran medios por partidos ganados, en líneas contra otras cuadras.

Se le vino a la mente el muelle de pto Colombia donde por aquellos cuando comenzará la carrera de medicina se iba el atardecer, para el uno de los mas hermosos del mundo, con sus aguas grises reglando con un amarillo de color arropilla los rayos del sol y el sol colorao como el achiote que la Sra marta le ponía a sus guisos.

Sintió que ese lugar del que habla esa canción, era en el que quería morir, pedía dar muchos tumbos por el mundo pero hay era donde quería dar su ultimo suspiro, a la una edad razonable cuado la experiencia nos llega … cuando ya no sirve para nada echar su ultimo suspiro sentado en frente del mar de Pto Colombia al acabar la ultima partida de domino de un domingo de desenguayabe en la playa, después de una interminable noche de parranda por los diferentes metederos de la noche y barranquillera y haberse comido el respectivo perrito caliente de antes de acostarse.

Y después de eso ser enterrado en los Jardines del recuerdo debajo de un palo de almendra, lo mas cercano a la cancha de fútbol de la universidad del norte, para poder ver los partidos de los pelaos de la universidad, y los gloriosos partidos del torneo de la amistad profesional esos clásicos Médicos A vs Médicos B y poder echarse un partidito de ves en cuando.

Porque Barranquilla no se sabe si es el mejor vividero del mundo, pero si es un sitio donde la gente no se muere de Fallo orgánico, multisistemico, ni de Adenocarcinoma de células en avena de pulmón, si no que es uno de los sitios donde el Sr. Fulanito de Tal Todavía se permite poder morir de viejo, Porque pasada cierta década de vida es lo que toca; morirse y para el indio suena mas digno decir Fulanito de Tal murió de Viejo con su sabiduría inservible, con su pelo blanco, con sus chácaras escurrías hasta los tobillos, con la oranza de los tiempos en que fue joven y entrompador, y por sobre todo con respeto de la gente, solo por la solemnidad que representa un pelo blanco con todos los años de experiencia que representa, y entones es mejor Morir de viejo que de cualquier otra enfermedad que dia a dia se inventa los médicos pa justificar que por mas sabios que se crean no van a poder con algo tan inevitable como lo es el llamado de la Parca.

Por eso es que el indio desde ese dia solo tiene algo claro para si, que si no es por un azar del destino EN BARRANQUILLA ME MUERO.


Una vuelta por Barranquilla


Por Maurcio Carrillo

Barranquilla es una de esas ciudades que se deberían visitar al menos una vez en la vida. Si no cuentas con la suerte de haber nacido allí, lo mejor es aliarse con un barranquillero y preguntarle que lugares visitar de la ciudad. He aquí mi aporte a la semana previa al aniversario de Curramba la bella.

El Aeropuerto Ernesto Cortissos es el primer lugar que pisarás en la ciudad, así que debes saber que en Barranquilla se inició la Aviación comercial y el correo aereo de colombia. Es importante visitar el Museo de la Aviación.

Saliendo del aeropuerto, debemos dirigirnos al puerto, el de más importancia a nivel nacional, y enseguida a la imponencia del puente Pumarejo, en ese instante debes preguntar como se llama en realidad y escuchar la historia que demuestra como la voluntad de un pueblo se impone sobre algunos lideres mediocres. Al dejar el puente subiremos por la calle 17 y pararemos en una de las tipicas tiendas de la esquina a tomar un vermouth debajo de la sombra de un arbol de Mango o Matarraton. Saliendo por la 17 giramos por Murillo hacia la derecha hasta ver la Iglesia de San Roque, cuya silueta me recuerda a las viejas catedrales europeas. Después de dar un paseo dentro de sus paredes y admirar sus frescos, debemos seguir por Murillo hsata la avenida Olaya Herrera y detenernos a contemplar el imponente edificio del Banco de la República. Al girar a la izquierda sobre la Olaya Herrera podremos observar seguidamente tres aspectos que marcan la vida barranquillera: 1. el puente tipico barranquillero, 46 sobre Felicidad, la catedral Metropolitana y el Sao de la 53.

Giramos por la derecha y rodeamos el Sao, al llegar a la esquina quedaremos con la boca abierta al apreciar el Teatro Amira de La Rosa que marca el inicio de lo que podriamos llamar el circuito del Viejo Prado. Barrio residencial que marcó la vida de la ciudad, el país y toda suramerica.

Si seguimos subiendo por las inclinadas calles de la Arenosa podremos observar: El Museo Romántico, la sede de El Heraldo, el World Trade Center, el arroyo del Country, Villa Country, Country Plaza, el Miss Universo, el parque Washington y el edificio Girasol.

Dando un rodeo por la ciudad podremos ver la Universidad del norte, la Libre, y llegar hasta Puerto Colombia ya fuera de la ciudad. Pero si al llegar a la 82, giramos a la izquierda en vez de seguir derecho, pasamos sin prestar atención al parque del Santo Cachón y sin preguntarnos si volverán a abrir el Nuevo Lido. Cogemos la cuchilla de la 83 raudamente y pasamos por el palo más grande que he visto en mucho tiempo, la casa de Amalín de Hasbún y el parqueadero de la 42b1, y detemos el coche en el que nos dirigimos frente al Minimarket 83 y la casa de los chinos. Veremos en el 4º piso del edificio que tenemos a nuestra derecha, al viejo Chalo esperando para tomarse unas frias, bailar salsa arrebatá y enseñarnos realmente la buena barranquilla.

Te animas?

Barranquilla: Ciudad de Pasión Rojiblanca


Por David Pino

Ya son 83 años de historia del orgullo deportivo de la ciudad de Barranquilla: Atletico Junior, Equipo que empezo en 1924 con el nombre de Juventud Infantil, cambiandose luego a Juventud Junior y en 1936 adopta el nombre de Junior Futbol Club. Los Tiburones, que vieron su nacimiento luego de una discusión debajo de un palo de mata ratón en el Barrio Rebolo, debutaron en la liga profesional colombiana en 1948 logrando el subtitulo.

Por el Junior han desfilado desde auténticas insignias del futbol Barranquillero como Roberto "el Flaco" Melendez y Efraín "El Caimán" Sanchez, hasta una gamada de estrellas brasileras (Heleno da Freitas, Victor Ephanor, Dida, etc) y argentinas ("La Bruja" Verón, "El Indio" Solari, Carlos Ischia, Juan Carlos Delmenico, etc), incluyendo también recientes glorias del futbol costeño como Carlos "El Pibe Valderrama", Ivan Valenciano o Victor Pacheco, y otras no tan recientes como Toto Rubio, Oscar Bolaños o Dulio Miranda.

Una de las mejores y más recordadas escuadras junioristas de todos los tiempos

Desde una "gloriosa" tarde de 1977 en Bogotá, hasta una tarde del 2004 en Medellín que paso "del infierno a la gloria" ya se han conseguido cinco titulos en la Liga Colombiana: 1977, 1980, 1993, 1995 y 2004. Y nuestro Junior sigue adelante porque la historia continua. Junior Tu Papá, los demás valen.......

Esto si es un barranquillero


Por Alejandro Angel Torres

El Mejor Vividero del mundo esta lleno de gente alegre, amable, calida y divertida

La ciudad considerada, por sus habitantes y por todo aquel que pasa una corta temporada en ella, como el mejor vividero del mundo es una ciudad con unas características que la hacen única.

Sus habitantes, los barranquilleros, son igualmente una especie única… no es difícil reconocerlos, Ud. es un buen barranquillero si:

- En una discusión te cuesta trabajo aguantar las ganas de decir directamente lo que
piensas y lo que sientes?
- Sientes que "te pican" los pies o te vibra el cuerpo cuando escuchas los tambores de una
cumbiamba?
- Sientes una gran emoción poniendo faroles el 8 de diciembre?
- Te hace mucha gracia ver a algún cachaco bailar porro como si se tratara de un bambuco o una guabina?
- Has acostumbrado o acostumbras sentarte en la puerta de la calle y sentarte en la puerta de la calle y saludarte con la gente que pasa?
- Has entrado o entras a las residencia de un vecino como si fuera la tuya?
- Te ha pasado algunas veces que te presentan una persona supuestamente desconocida y al poco rato los dos descubren que tiene alguna relación en común o que se conocían anteriormente?
- Sientes que tienes un(a) "llave" en diferentes oficinas publicas de Barranquilla?
- Cuando caminas un rato por el Paseo Bolívar, por la 72, o por la 84, te saludas con más de una persona
- Eres capaz de contar un chiste o una historia graciosa en una reunión?
- Eres capaz de "armar recocha" con otros y de "prender" un baile?
- Con cierta frecuecia usas la palabra "chévere"?
- Con cierta frecuencia dices "Ajá y como se hace"?
- A veces dices "Ñercoles", "Ñerdi" o algo parecido?
- A veces dices "No friegues", "No joñi" o algo parecido?
- Las palabras vaina y carajo suenen muy naturales en tu boca?
- Te gustan las "alegrías"?
- Te gusta la mojarra frita?
- Te gusta el sancocho de guandul?
- Te gusta la butifarra?
- Te gusta el chicharrón?
- Te gusta el guarapo?
- Te gusta el "raspao"?

Ver todos los signos del buen barranquillero en el Barranquillerometro del Dr. Ramon Rojano


MI TOP FIVE (canciones a Barranquilla)


Por Cheo Carrillo

Que tendrá Barranquilla que cierto tiempo rula por el mundo alguna canción que habla de ella. Lo que sea es… y lo tiene lo tiene porque. Barranquilla es como esas personas que te caen bien sin saber por que.


TOP 1: En Barranquilla me Quedo.
Interprete: Joe arroyo y la verdad.
Compositor: Álvaro José Arroyo
(Del caribe aflora, bella encantadora con mar y río una gran sociedad. Barranquilla hermosa yo te canto ahora).


TOP 2: Las cuatro fiestas.
Interprete: La Seño, Nury Borras y el cuarteto del Mónaco.
Compositor: Adolfo Echeverría.
(Toma, toma, tómate el trago Juan, toma, toma pa que puedas bailar).


TOP3: Frutos del Carnaval.
Interprete: Cuco Valoy.
Compositor: Cuco Valoy.
(Arranca pelá, que llegó la tribu con la rumba barranquillera al carnaval).


TOP4: La Guacherna.
Interprete: Los vecinos.
Compositor: Esther Forero.
(Ahí viene la guacherna me envuelve su compás la reina de los barrios la reina’ el carnaval, comparsas, mochilas y abarcas tres puntá).


TOP5: Barranquillero arrebatao
Interprete: Fruco y sus Tesos.
Compositor: Víctor Raúl Sánchez.
(La libertad es como la vida, solo la merece quien sabe conquistarla todos días, este cantar es para ti barranquillero).

Me perdonaran si algún barranquillero cree que deberían estar otras, pero estas son las que a mi me parten el ojo. Y gracias a Dios que tenemos pa escoge y regala.


Homenaje a Barranquilla...



Por su gente acogedora, por sus mujeres hermosas
Por sus calles arenosas, por un arroyo turbulento
Por su brisa decembrina, por una tarde gris de abril
Por el desafiante encuentro entre el Río y el Mar
Por los amores entre la Luna y el Río
Por su Sol quemando las Olas

Por una tarde de ayer jugando bola de trapo
Por un viernes de Guacherna en la 72
Por un sábado de Carnaval en la vía 40
Por un domingo de Junior en el Metropolitano

Por un sancocho de guandú debajo de un palo de mango
Por una mojarra con patacón en Puerto Colombia
Por un sancocho de mondongo en el patio de los abuelos
Por unas cervezas jugando domino y escuchando salsa

Por su gloria pasada, por el progreso actual
Por su historia, por sus 194 años
Porque nacimos en ella y porque no la olvidamos
Por eso le rendimos un sentido homenaje

ESTA SEMANA EN COPERA…

Con Actualizaciones diarias y Multipost el 7 de Abril

Copera Transatlántico

Cada uno de los miembros del Grupo Copera nacieron en aquella zona donde las ilusiones se confunden con la rutina; una zona que se puede aproximar geográficamente a Barranquilla, a Santa Marta o Cartagena; una zona que por añoranza se redondea a Macondo; una zona caribeña que en últimas está separada por el Atlántico de su actual paisaje.
Cierto día cada coperador besó el viejo continente, ahora juntos, recuerdan los primeros pasos sobre tierras europeas.

Salida Caótica

Por: Alejandro Ángel Torres

La infaltable foto bajandome del avión, si, la mancha que se ve al fondo soy yo


- ¿Y a que hora nos revisan las maletas acá? Le pregunté con la inocencia del que
ha viajado poco –e imaginando lo peor- a mi recién conocida compañera de
viaje.

- ¿Revisarnos las maletas? Pero si ya estamos fuera de inmigración ya estamos en suelo español ya no nos van a revisar mas nada… fue su asombrada respuesta.

Ya. Esa fue mi llegada a España. Eso era lo que había que contar esta vez en el multipost ¿o no?

Sí, ya sé, un poco aburrida; pero así fue. Ahhh pero la salida de Colombia esa si no tuvo nada de aburrida…

Después de las varias despedidas en Santa Marta y Barranquilla ya me encontraba en Bogotá, aeropuerto El Dorado listo a buscar el sueño europeo y con la vista nublada quizá por la alegría del viaje, quizá por los recuerdos de la despedida de la noche anterior con mis amigos “cachacos”.

En fin que el gran día había llegado, atrás quedaban los meses de jodedera a mis amigos, familia y a quien se dejara con el monotema de “me voy para España, me voy para España, me voy para España”.

Pero el gran día prometía en convertirse en una gran Odisea, mayor que la que vivió Ulises… y vaya si se convirtió en Odisea.

Canto Primero de esta Odisea.
Yo no creo que tenga cara de malandro o de delincuente, pues los encargados de seguridad del Aeropuerto El Dorado en Bogotá parece que no pensaron lo mismo por que como que me vieron cara de mula. Me explico, las medidas de seguridad y registro de posibles traficantes y transportadores de drogas incluyen examen de Rayos X para encontrar sustancias ilícitas dentro del cuerpo o requisas exhaustivas al equipaje del sospechoso buscando las mismas sustancias encaletadas en cualquier parte del mismo. Normalmente los agentes de seguridad escogen a quienes les hacen la requisa más que nada basados en el aspecto de las personas y sobre todo un poco al azar, pero un joven, bien vestido, sin acompañante hummm da mala espina.

Al menos eso entendí yo por que si es algo al azar y solo te hacen una de las dos (es decir o te hacen Rayos X o te revisan la maleta o ninguna de las dos) bueno pues bendita Ley de Murphy* que se ensaña contra mi; primero me pasaron por la maquina de Rayos X , como es obvio no encontraron nada, me cambié y fui a hacer la cola para entrar al avión, mientras estoy esperando veo una lista de 4 números de tiquete separados de los demás; si, adivinaron, ahí estaba el mío y si, adivinaron, era para requisarnos la maleta.

Canto Segundo de esta odisea
Cabe resaltar que dicha maleta era una tula gigante en la que traía toda mi vida armada para los siguientes 7 meses que estaría estudiando en Madrid, así que imaginen las proporciones y sobre todo los días que gasté empacándola con mi querida abuela -que ha viajado mucho y es experta en estas lides- por eso en el momento que me hicieron abrir la maleta cada pantalón doblado, las camisas ubicadas de lado para rendir más la maleta, los calzoncillos y medias apretados dentro de los zapatos para ganar espacio, en fin todo tipo de mañas realizadas para que cupiera toda mi vida futura en una maleta se fueron a la mie…. Digo a Itaca con Ulises.
Después de una extensa requisa, de desarmar de un lado para otro la bendita maleta y no encontrar nada -como era obvio-, de interrogarme una y otra vez, de mostrarle los papeles de la bendita beca, de vaciar talcos y cualquier cosa que les pudiera parecer sospechosa el policía me dijo con el mayo descaro del mundo

- Bueno; ya está. Parece que no hay nada. ¡Ah! y rapidito que lo deja el avión.

Casi le pego, pero bueno ni modo a medio ordenar, que digo ordenar a embutir* la ropa y rogar que no me fueran a meter nada raro en ella en el vuelo por que la maleta no pude cerrarla ni con todos los esfuerzos del mundo.

Primera foto que me tome como turista en Madrid, frente al Palacio Real

Canto tercero de esta odisea. ¿Ulises como aguantaste 24 cantos?
Me siento en mi silla, bueno sentarme es un decir, me aprieto en mi silla, definitivamente la clase turística de Iberia no es lo mas recomendable para alguien que mida mas de 1, 80 –yo por ejemplo- bueno pero incomodo y lo que fuera ya se acercaba más mi llegada al viejo continente…sólo me separaban 11 horas de las cuales esperaba dormir al menos 7 para que no se hiciera largo el recorrido. Pero Murphy volvió a arremeter contra mi y a mi lado sentó al viejito más cansón y hablador del mundo y ojo que yo soy hablador así que para que diga que el tipo era hablador es que era HABLADOR. Así que entre el viejito hablador, las silla incomoda y las bulla de los parlantes de la TV que llevaba al lado creo que dormí como una hora, obviamente siguiendo la estela de Mr. Murphy me quedé dormido cuando finalizaba la película a la que le había gastado 2 horas y media y me quede sin saber si DiCaprio moría o no al lado del barco grande ese ;-).

Y se acabo la odisea, llegué a mi Itaca
Bueno no todo podía ser quejas al rato conocí en el avión a una niña de Bogotá que iba a Madrid con la misma beca que yo, ahí empezamos a hablar y me salvo de la parla del viejito vecino. Transcurrido un buen rato sonó música para mis oídos

- Señores pasajeros nos alistamos para aterrizar en Madrid, son las 10: 20 de la mañana hora local, rogamos mantenerse en sus asientos hasta que culmine el aterrizaje y blablablablabla….

Como la propaganda de Fanta grite alegre “llegamos a Madrid, llegamos a Madrid”, me bajé del Avión con la ilusión obvia de ver cumplido el sueño tantos meses preparado y a la expectativa de lo que venia para mi vida, eso si todavía faltaba la requisa de la policía en Madrid, si me revisaron tanto en mi propio país pues en el Aeropuerto de Barajas suponía que me harían hasta revisión de cavidades* si era necesario.

- ¿Y a que hora nos revisan las maletas acá? Le pregunté con la inocencia del que ha viajado poco (e imaginando lo peor) a mi recién conocida compañera de viaje.
- ¿Revisarnos las maletas? Pero si ya estamos fuera de inmigración ya estamos en suelo español ya no nos van a revisar mas nada… fue su asombrada respuesta.

Ya estaba en Madrid y ahí empezó mi Odisea viviendo en Europa pero esa es otra historia y da para 24 cantos y más…en ese momento al menos ya estaba acá.

*Ley de Murphy: «si algo tiene la posibilidad de salir mal, saldrá mal»
*Embutido: Apretado.
*Revisión de Cavidades: Recuerdan a Beavis and Butthead en el MTV

Memorias del Primer Año / (Entrega Definitiva)
Por: David Pino

Uno, dos, tres, cuatro...
Cinco:
Tras terminar mí cena en Estocolmo en casa de un amigo, y en la que justamente recordé que estaba cumpliendo un año fuera de casa, hice memorias sobre mi viaje. Mi mente viajó 365 días de vuelta y paso por Lulea, Estocolomo, Barcelona, Madrid y llegó hasta el aeropuerto Rafael Nuñez en Cartagena de Indias. Cuando crucé la puerta de embarque acababa de despedirme de mi familia; entonces debí esperar un vuelo que afortunadamente solo se retraso dos horas, porque las historias de una aerolínea que ya paso a la historia eran famosas desde ese entonces. Durante la espera algunos viajeros charlábamos, y nos contábamos nuestras historias de viaje; compartíamos un destino pero andábamos distintos caminos. A los pocos instantes de entrar al Airbus que me atravesaría el océano mi compañera de silla me pregunto: “es la primera vez que viajas?” entonces recordé inmediatamente las ya verídicas palabras de mi profesor Antonio Bula: “siempre se puede reconocer a los que viajan por primera vez”. En ese avión se pasaron nueve horas entre tratar de dormir, mal dormir, comer algo y escuchar música.

Cuando llegue a Madrid eran casi las dos de la tarde y el cansancio agobiaba, pero la jornada no terminaba. Después de la larga fila de inmigración atravesé el Barajas cometiendo la primiparada de no tomar un carrito y cargar mi maleta por todo el aeropuerto. Y tanto esfuerzo y afán no fueron suficientes para impedir que perdiera mi conexión a Barcelona y el viaje se alargará. Debí esperar hasta la noche pero afortunadamente sin pagar nada extra como me temía. Así que tras casi veinte horas de viaje llegue a mi destino donde empecé una nueva etapa de mi vida. De mi primera vista de Barcelona aún tengo el vivido recuerdo, era de noche y las luces iluminaban el puerto y la ciudad mientras se reflejaban en el agua, una vista que evocó mis recuerdos de niñez cuando regresaba a Barranquilla por la noche y antes de cruzar el Pumarejo se divisaba en medio de la oscuridad la ciudad y su puente iluminada por sus luces. Una imagen que ya anhelo ver otra vez.


Fin

El 13 de Septiembre

De Barranquilla a Barcelona Parte II*
"¡Corran, corran! ¡Por aquí, por aquí!..."

Después de haber pasado 5 horas esperando en “El Dorado” y una hora en el avión hasta Caracas, tuve que correr a buscar el avión que me llevaría a Madrid. El trasatlántico me tuvo 13 horas sobrevolando el océano con el ansia encima y el hambre adentro. ¿Qué puedo hacer después de tan largo vuelo? Pues buscar un teléfono para llamar a la casa para decir que estoy bien. ¡Qué vaina! ¿Ahora a quién llamo? ¿Cómo era el teléfono de esta pelá’? ¿Donde fue que lo apunté? Me queda más fácil por Internet. No sin antes recoger mis maletas… No hay maletas. Claro, yo tuve que levantarme y andar rápido hasta el aeroplano que me ayudaría a saltar el charco y que creo nos estaba esperando en suelo venezolano; las maletas no pudieron hacer lo mismo. Una hora más tendría que volar para llegar a Barcelona.

Milena, la pelada de Barranquilla, y su novio Lucca, me esperaban en el Prat. Detrás de ellos, un gordo caballo de bronce símbolo de que lejos estaba yo de ser el primer colombiano en pisar España; no es que lo pensase así pero sí que le daba un toque de rutina a mi atípico viaje.

Así comenzó mi aventura en el viejo continente. Dos maletas perdidas con casi todas mis cosas en ellas, un maletín con poco más que mis documentos y efectivo, una muda casi toda comprada en Bogotá, una manillita de Colombia, y poco más.
-¿Dónde puedo comer que sea bueno y barato?- pregunté.
-El Pans & Company no es el más barato pero está muy bien.-respondió Milena.
Y así, mi primera comida fue un bocata de omelet con cocacola en el pans; 6 euros. Saqué cuentas ligeras y pensé que Lesmes exageraba un poco cuando con el cuento de “¿Dónde cocino?”

Ese 13 de Septiembre de 2005 terminé durmiendo cerquita a La Rambla, en una habitación de 20 euros la noche. En medio del trastorno de horario seguro que mis últimos pensamientos fueron que al día siguiente tenía que comprar algo de ropa, comida y agua.
*La primera parte después.

Homenaje al Maestro


Muchos años después, frente al pelotón de coronación en Estocolmo el gran escritor Gabriel García Márquez habría de recordar aquella remota tarde en Aracataca en el que su padre lo llevó a conocer las instalaciones del telégrafo del pueblo.

El telegrafista era su padre, quien a pesar de los temores del chico, le agarró la mano y se la puso sobre el instrumento con el que transmitía sentimientos y sensaciones y alguna que otra mariposa amarilla de pueblo en pueblo. El chico tocó la pieza y retiró rápidamente la mano, “está helada”, dijo, su padre le contestó: “No está helada, está fría, esperando ser usada”, en ese momento Gabito empezó a descubrir el mundo de la comunicación y el relato de sucesos e informaciones. Tecleó lentamente un símbolo, después otro y otro hasta completar una palabra y, sin comprender por qué lo había escrito quedó sorprendido con la cara de su padre. Estaba absorto, había visto los códigos que completaban cada letra, así hasta la finalización de las dos únicas palabras. Lo descifró y lo vio, de ahí su sorpresa: Grupo Copera. Sin saber que significaba le preguntó al chico: “Gabito, ¿por qué has escrito esto?”, respondiendo el que muchos años después luciría un Likiliki: “No lo sé, aunque he tenido la visión de que el día 11 de marzo de 2007 me harán un homenaje, por mi 80 Cumpleaños, en algo que la gente llamará blogs.

Más de medio siglo esperando, ¡No dejes de leer!




La historia tal cual la contaron


Fue así como explicó la historia a un grupo de familiares que se reunían alrededor de una gran botella de Buchannans: “Mira, doña Tranquilina, te digo que estoy,,, pero es que... mira...a mí lo que más me... a mí lo que más me... a mí lo que más me choca, es que esa malagradecida yo pensaba que me iba a dar un nietecito con los cabellos rubios y los ojos rubios y los dientes rubios, así como Troy Donaheu y viene y se marcha con... con... con ese tusa!, ay, ay no! Ay... esta juventud!”. Fue así como él la escuchó, aunque mucho después frente a la vieja máquina de escribir Olivetti, con la que relató sus grandes recuerdos, la explicó de una sugerente y diferente manera: “... en el instante mismo en que Remedios, la bella, empezaba a elevarse. Úrsula, ya casi ciega, fue la única que tuvo serenidad para identificar la naturaleza de aquel viento irreparable, y dejó las sábanas a merced de la luz, viendo a Remedios, la bella, que le decía adiós con la mano, entre el deslumbrante aleteo de las sábanas que subían con ella, que abandonaban con ella el aire de los escarabajos y las dalias, y pasaban con ella a través del aire donde terminaban las cuatro de la tarde, y se perdieron con ella para siempre...”

Así, Gabriel García Márquez, el gran observador, relataba a su manera sus recuerdos de infancia. En el Caribe colombiano existe una gran tradición alimentada por la realidad, en cada reunión familiar las historias se repiten. Alguna vez uno de los nietos se levanta en medio de una de las hazañas del padre de su padre con la impertinencia y el desdén de pedir “me llaman cuando el abuelo regrese de la muerte otra vez”. En medio de un manotazo éste es puesto en vereda y toca recibir otra vez la dosis de historia familiar que amerita la ocasión. Pues así la historia de Gabito no era diferente, cada vez escuchando y rumiando las historias, miles de anécdotas repetidas hasta la saciedad.

Un día estando en casa de la tía, llamada de cariño Pía, la familia se reunió para recordar el tercer mes de fallecimiento del abuelo Ché, ese personaje que bien podría confundirse con la figura de José Aureliano Buendía. En un momento de efervescencia y calor en plena confabulación, discusión y divertimiento de la historia familiar, el difunto can Chapulín emprendió una carrera alocada hacia la puerta y con el lomo erizado empezó a aullar. En ese momento la puerta retumbó con tres golpes: tumm, tumm, tumm...; Silencio absoluto. Celso, el marido de Pía, en medio de su habitual monserga de improperios diciendo: “¿Quién se atreverá a tocar a la puerta de esa forma y a esta hora de la noche?”. Abrió la puerta y logró ver la figura de nadie, soledad absoluta. El silencio rodeó la casa y todos en medio de una carrera espectacular se apelotonaron en una de las habitaciones de la casa. Ahí hasta la mañana siguiente. Así fue la historia de lo que después se dedujo era el cumplimiento de la promesa del abuelo de contestar algo, tres meses después.

Historias como ésta suceden en el caribe colombiano. Un genial relator las escucha y escribe, posteriormente es coronado. Así es la historia tal cual la contaron.

Un día después de uno de los regresos a Barranquilla, vio Gabito entrar a su padre ofuscado y embriagado por la puerta principal de su primitiva casa gritando de alegría una incomprensible sarta de frases. Algo había ocurrido en el centro de la ciudad, entre el callejón de los meoas y la calle bajito había observado una nueva fábrica que le llamó la atención al instante mismo de ver sus productos. Trozos de algo que, hirviendo, enfriaba cualquier cosa que tocara. Al principio el padre pensó que se trataba de piedras preciosas, poco después uno de los operarios le corrigió explicándole las naturalezas acuáticas del hielo. Su padre explicaba al entrar en casa que aquel era un prodigio capaz de hacerle olvidar las penas de sus empresas delirantes. Al ver aquel bloque transparente, que, con infinitas agujas internas dejaba escapar un aliento glacial, llegó a la conclusión y así se lo trataba de comunicar a su familia: “Este es el gran invento de nuestro tiempo”.


+ + + CUENTO DE OLORES + + +


Por Carlos Mario Soto

Ahí estaba él, columpiándose en la hamaca que sostenían dos gruesos nudos de cabuya plástica. Ahí estaba él pensando en lo que hizo, en lo que haría. Se detuvo, se sentó y se levantó luego. Las tablas que lo sostenían se quejaron las unas contra las otras. Aspiró profundamente el aire húmedo y cálido que lo acariciaba. Olía a agua y a monte, a mango y a limón, a guayaba y a guineo. Cerca de él, miles de hormiguitas rojas listas para combatir con escozor fórmico a quien se atreva a romper su hilera de extremos invisibles. El río que corría frente a él le sonó como canto de sirena. Ensució sus pies de tierra y monte hasta que llegó a la rivera. El sol lo había radiado suficiente para hacerlo entrar al agua. Se metió suavemente hasta que su toda su franela mojada sobo el accidentado mapa de su larga vida. Del otro lado del río las vió; unas flores que le recordaban a ella. Emprendió camino a la otra orilla y cuando sus pies estuvieron muy lejos del fondo, su pecho estuvo inmensamente comprimido y el olor a flores que sentía se volvio demasiado, supo al fín porqué y por quién estaba ahí. Recordó como él había muerto.

Cuento escrito algún día de 1999 y firmado con seudónimo de El Marqués García.
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Datos interesantes del cuento
+ El cuento original lo escribí para el único concurso en el colegio que participé y quedé de tercero de todo el colegio. Como siempre yo de cagao...
+ Este cuento es lo que pude rescatar de mi archivo mental. Lo tenía escrito en una libreta que le he pedido a mi hermana escanear y me dijo que no la encontraba...
+ El peseudónimo lo puse porque cómo estaba escrito el cuento original, yo sentía que había escrito algo con un realismo mágico, ahora ni me acuerdo del cuento completo ni me atrevería a acerverar tal alcance del mismo; pero ajá, en su momento lo fue y es mi homenaje a Gabo.
+ El cuento fue escrito antes de que saliera la película "Sexto sentido". Me sorprendió entonces la similutud de ambas historias.


Mi primer libro leido



Por Cheo

Cuando la profesora de español Carmen Coronel, en 7º grado nos dijo que teníamos control de lectura para dentro de dos meses de alguno de estos libros: Pedro Páramo, La vorágine o El Coronel no tiene quien le escriba, a mí se me quiso caer el mundo encima porque con esta profesora había que hacerlo, porque era de esas a las que uno le llamaba TESA, que con sólo su presencia ya imponía respeto o por lo menos me lo imponía a mí. Con su complexión huesuda, su cara siempre de estar amargada o mascando alguna pena y ese aire de “lo sé todo y a mí nadie me engaña”, que poseen ciertas personas, a las que tú sabes que ni por más ingenio, ni trabajo que le pongas a la mentira se la va creer, porque parecía tener una bola de cristal que lo adivinaba todo. Y como si fuera poco, era de esas que no le importaba humillarte enfrente del tablero, diciéndote lo bruto que eres y que no ibas a servir ni para echarle el maíz a los pollos.

Mi respeto se convirtió en miedo, el miedo en pánico y el pánico en terror… sí terror. Terror de que me pasara al tablero y salir con un chorro de babas y ser el hazmerreír de mis compañeros, no por lo ocurrente que era, ni por los apodos que ponía a la gente, si no por ser uno más humillado por la seño Carmen.

Tomé la decisión: “A mí no me va a coger de monita”, llegué a casa, le dije a mi mamá que tenía que conseguir alguno de esos libros, ella presta salió conmigo a la librería a buscarlos, llegamos, miramos los tres y yo me decanté por El Coronel no tiene quien le escriba, no por el autor, no por la portada, si no por ser el más corto, es que así tenía más posibilidades de éxito de completar la misión de leer un libro sin muñequitos.

Pero con todo y eso, no fue posible ponerme a la tarea y ahí con esa capacidad que tenemos los Carrillo Palacio de estar siempre con el agua al cuello, con todo para última hora, me encontré a dos días del control de lectura sin haber sacado el libro de la bolsita de la librería Panamericana. Y creo que cuando escuché a la profesora Carmen decir “El control de lectura es para pasado mañana”, el famoso hilito amarillo comentado muchas veces con el polifacético Mauricio; afloró por mi calzoncillo pensando: “No voy a alcanzar ni si me ponen un turbo en los ojos”.

Pero algo ocurrió al abrir el libro, nada más ver que el personaje me recordaba a mi agüelo difunto, que sólo conocía por las leyendas que contaban de él en el pueblo y por una que otra foto vieja en donde me tenía en brazos llevándome a paisajes conocidos, no pude pará de leer una a una sus palabras. Me fui metiendo dentro de su vida, de su entorno, devoraba una a una sus páginas. Y ahí, recostado junto a la pared del salón de español de 7º grado del Colegio San José de Barranquilla, 5 minutos antes de entrar a clase con la Profesora Coronel, leí aquel final que me atravesó como trago de Ron blanco. “ Y que carajo vamos a comer”; me imagino todavía al coronel con el ceño fruncido, con la mirada al suelo sintiendo ese chispazo de orgullo que nos hace tener claro que nuestras ilusiones, por ser nuestras, están por encima de todo, y que si se tiene que caer el cielo, que se caiga porque se tiene que ser digno en este mundo… levantar la cabeza y decir a todo sentimiento… MIERDA.
Desde ese momento no pude despegarme de la lectura, y tener la sensación de que no alcanza todo el tiempo para todas las páginas que hay que leer.

Gracias Seño Carmen donde quiera que esté…
Gracias Gabo… feliz cumpleaños.



Gabo: Leer su obra para revivir la vida

Por David Pino


Muchos años después, sentado frente a mi computador, había de recordar aquellos días de mi infancia en los que por primera vez leí una novela; ésta se hizo comentada entre todos mis compañeros del colegio porque finalizaba con la palabra mierda. Esos eran los días en que tenía que leer a García Márquez para aprobar “Español y Literatura” en el colegio; ahora estoy en los días donde no puedo vivir sin leer a García Márquez.

Mis primeros encuentros literarios con Gabo fueron por compromisos académicos. Pero su prodigiosa imaginación rápidamente llamó mi atención y la de otros amigos; a mis 11 años de edad leí el primer cuento de Gabo por voluntad propia, fue La prodigiosa tarde de Baltazar, cuya historia giraba en torno a una jaula a la que “ni siquiera era necesario ponerles pájaros”. Desde esos días su celebrada obra empezó a maravillarme y hoy en día sus libros Cien Años de Soledad, El Amor en los Tiempos de Cólera y Vivir para Contarla, son imprescindibles para mí.

Y aunque celebridades, genios, y el mundo entero celebre toda su obra, para mí como costeño su obra transciende, además, méritos literarios e intelectuales. Gabo narra en un modo inigualable miles de historias, vivencias y personajes, que sólo han podido ser inspirados en una fascinante tierra como la nuestra. Por eso, nosotros los costeños tenemos el privilegio único de entender su obra en un modo en el que nadie más puede y, a la vez, tenemos el orgullo de que su obra sea embajadora de nuestra cultura e idiosincrasia en el mundo entero.

Por eso, para mí, leer la obra de Gabo es atarme a mis raíces, es estrechar mis costumbres, es sentir mi tierra, es recordar y revivir mi vida.


Gabo en V.O (Versión Original)


Por Alejandro Angel



Pensaba esta semana el tema con el que homenajearía a Gabriel García Márquez por sus 80 años de vida, los 40 de su obra cumbre Cien Años de Soledad y los 25 de la obtención del Premio Nobel de Literatura; mi idea inicial era tomar una frase de nuestro Nobel, con la cual cierra la primera parte de Vivir para contarla el libro de sus memorias, que cuando la usé como firma en mis emails a familia y amigos trajo muchas y muy agradables respuestas sobre todo por que me iba como anillo al dedo

"... Sin embargo, al final agregué una posdata que me cegó como un relámpago al mediodía en el instante de firmar: si no recibo contestación a esta carta antes de un mes, me quedaré a vivir para siempre en Europa"

Y a partir de ahí escribir algo.

Pero el realismo mágico se ve hasta en Barcelona.

Voy en un tren hacia mi trabajo, leo un libro, oigo mi mp3 estoy inmerso en mi pequeño mundo, en eso algo de lo que lee mi vecina de asiento llama mi atención. Disimuladamente leo un fragmento:

"Úrsula tuvo que hacer un grande esfuerzo para cumplir su promesa de morirse cuando escampara. Las ráfagas de lucidez, que eran tan escasas durante la lluvia, se hicieron más frecuentes a partir de agosto, cuando empezó a soplar el viento árido que sofocaba los rosales y petrificaba los pantanos, y que acabó por esparcir sobre Macondo el polvo abrasante que cubrió para siempre los oxidados techos de zinc y los almendros centenarios."


No hay duda, es una versión en español de Cien Años de Soledad, lo que más me llama la atención es que la chica que lo lee tiene en una mano el libro y en la otra un diccionario Deutsch - Spanisch, ya de por sí las finas facciones de la espiada lectora denotaban cierto aire de extranjera en eso suena su móvil y, voilá, empieza a hablar en alemán.

La miré de reojo un par de veces buscando romper la barrera y un segundo después con todo el desparpajo que mi caracter costeño me brinda le pregunté sin más ni más:

- ¿Qué te ha parecido el libro? ¿te ha gustado?

Un poco asombrada por la inoportuna -y sobre todo extraña por estas tierras- intromisión Tanja (no se llama así, y ni idea como se llamaba pero por llamarla de alguna manera) me contestó -en un español gangoso- con un escueto

- Muy bueno.

Yo para mis adentros pensé una de dos o lo está leyendo "obligada" para alguna asigantura de la universidad o pasa de mí directamente, aún así vuelvo a la carga y súper indiscreto le pregunto:

- ¿Y por qué no compraste una versión en tu idioma?, digo hubiera sido más fácil.

Y es que las obras de Gabo están traducidas a más de 20 lenguas desde su español original hasta el hindú pasando por versiones rusas, polacas y hasta en braile.


- Es que quería leerlo en su idioma original y así poder encontrarle toda la carga emotiva a la obra, todo el sentimiento que él quiso darle cuado la escribió y no una traducción que muchas veces se aleja del verdadero sentimiento, sentir y sufrir del escritor.

Es en ese momento cuando el entrevistador se vuelve entrevistado y es ella la que me pregunta:

- ¿Y por qué tanta curiosidad?

Yo le muestro la manilla con la bandera de Colombia que llevo en mi mano derecha desde que salí del aeropouerto El Dorado hace ya lejanos 2 años y más y le digo:

- Soy colombiano, soy caribe, me crié en una ciudad cercana a Aracataca su ciudad natal y de la que parten muchas de sus historias e incluso mi abuelo materno es cataqueño.

En ese momento sus verdes ojos se iluminan. Fue una sensación súper interesante por que ahí estaba yo en Barcelona, a 12 mil km de distancia del soñado e imaginado Macondo, hablando medio en inglés medio en español, con una alemana a la que se le iluminaba el rostro por conocer a alguien del país de Gabo.

- Es mi escritor favorito me he leído todos sus libros- me dice- por cierto, ¿qué significan estas palabras?

Me muestra una hoja donde ha ido anotando palabras para las que no ha encontrado traducción en diccionario o que la que encontraba no le parecían coherente con el contexto, tales como chucherías, capirote, chafarote y varias más, me las ingenio para explicarle más o menos qué es y me dice:

- Ves porqué prefiero leer a García Márquez en su idioma original, eso no tiene una traducción exacta en el libro y ni con el mejor diccionario del mundo.

Mi tren llega a su destino, quisiera seguir hablando con ella, hablar de los Buendía y su estirpe, hablar de la Candida Erendira y su abuela desalmada o de cómo el coronel se tuvo que alimentar...en fin tantas conversaciones que podría dar de sí la obra de Gabo, pero me toca bajar, me despido.

La enorme sonrisa con la que me despide "Tanja" me muestra que el realismo mágico existe. Pero mejor si es en versión original.

Gabo en Imagenes

En su tierra natal

Con su gran amigo Fidel Castro


Con su gran amigo y colega, el Argentino Julio Cesar Cortazar


Con otro grande de las letras, Pablo Neruda


En el Festival de la Leyenda Vallenata en Valledupar. El Vallenato es una de sus grandes pasiones y dice que "Cien Años de Soledad es el vallenato más largo que se ha escrito"